¡Jorge y Jesús completan la UTMB y recaudan 1.300 euros!

El pasado 30 de agosto, la inmensidad de los Alpes se alzaba ante la mirada nerviosa e impaciente de los retistas, Jesús González y Jorge García, y de todos los que les acompañamos, apoyándoles en esta imponente aventura que suponía superar el Ultra Trail de Mont Blanc, también conocido como UTMB. ¡Toda una proeza deportiva y un nuevo gran #RetoGaiato que marcar como superado en nuestro calendario!

Las condiciones del UTMB son extremas: 3 países -Francia, Italia y Suiza-, 172 kilómetros de distancia, 10.225 metros de desnivel positivo o 1.355 metros de subida ininterrumpida. Todo ello completado por nuestros retistas en un tiempo de 42 horas y 15 minutos, quedando entre los 1.000 primeros participantes en entrar a meta de un total de 8.500 deportistas. Y a ello hubo que sumarle ¡las condiciones meteorológicas adversas! 

“Los presagios se cumplían y pronto la llovizna se convirtió en chaparrón. La emoción que nos embargaba ante la salida era indescriptible, suena Conquest of Paradise de Vangelis, los pelos de punta… ¡Y salimos!”. Así comenzaban Jesús y Jorge sus gran aventura por los Alpes, partiendo de la localidad francesa de Chamonix-Mont-Blanc. Sus ánimos y sus físicos fueron respondiendo bien durante las primeras decenas de kilómetros de recorrido. “Íbamos frescos, contentos y con muchas ganas. La gente del avituallamiento fue espectacular y el ambiente único, lo que nos llenó de fuerzas para afrontar el siguiente tramo, casi 25 km de subida ininterrumpida con 2000 de desnivel positivo”. La dureza del recorrido fue extrema y cayó la noche para los deportistas, que empezaban a sufrir las primeras consecuencias del desgaste físico, como nos explica Jorge. “Sufrí mucho para coronar el Col des Pyramides Calcaires. La noche llegaba a su fin y ya eran varias horas con el frontal en la cabeza y lo monótono de la lenta subida que hacen que el cansancio y el sueño se apoderaran de mí. Jesús gestionó bastante bien el sueño y coronó la cima bastante mejor que yo. Las vistas desde aquí eran espectaculares y, a pesar de todo, no perdemos la sonrisa. ¡Hay que seguir disfrutando!”. 

Las palabras de Jorge demuestran la dureza del reto. Toda una noche de subida sin dormir y tras ello tocó afrontar la dureza del Arête du Mont Favre. Nuestros retistas se encontraron al final de la dura subida, cada uno a su ritmo, pero con un pensamiento común: “los paisajes eran, sin duda alguna, inspiradores y es cuando te das cuenta realmente de que el esfuerzo invertido merece la pena”. 

Tras el esfuerzo comenzaron una bajada más tranquila y cayó la tarde en el momento en el que Jesús y Jorge decidieron afrontar la durísima subida hasta el Col Ferret (Italia). Y ahí se confirman los peores presagios: “nos va a pillar la tormenta”. Y es que sus impermeables no consiguieron mantener secos a los deportistas, que sufrieron las consecuencias de una gran tromba de agua y granizo que provocó incluso una avalancha de lodo y piedras durante el recorrido, sin dejar, por suerte, ningún daño personal entre los participantes. Pero la dureza extrema de las condiciones hizo que muchos deportistas decidieron abandonar en este punto, mientras que la resistencia y los ánimos de Jesús y Jorge tenían aún batería para seguir afrontando este gran reto. ¡Increíble su fuerza mental y física! “Yo cada vez pensaba más en la llegada y me emocione por dentro solo con imaginármelo. Se estaba haciendo muy duro pero, sorprendentemente llevadero”, explica Jorge. 

Tras ello tocaba afrontar el último tramo de carrera (42 km), “a nuestro parecer,  el más duro y complicado: tres duras subidas de entre 5 y 6 km cada una, con unos desniveles positivos que rondan los 800-900 m”. Y cayó la noche de nuevo. Con los últimos ascensos y descensos, el sueño se apoderó de muchos corredores y el camino se hizo más duro y monótono. “Llevábamos más de 140 km ya recorridos y el cuerpo se iba resintiendo”, comenta Jorge. “El sol nos atrapó a mitad de subida a la Tete aux Vents (Francia) y no nos abandonó el resto de carrera. Nos daba fuerzas. Nos quedaban unos 5 km hasta La Flégère y luego otros 8 km de bajada hasta Chamonix. ¡Esto ya estaba casi hecho!”. 

La gente se agolpaba ya en el camino para recibir a los corredores con aplausos y vítores. “El momento fue realmente emocionante. Bajamos tranquilos y con cuidado debido a los diversos dolores que sufrimos después de todo esfuerzo. Nos envuelve el gentío la Place Balmat y entrar en la mítica Place de l’Église”. Jesús y Jorge ya veían la meta y se fundieron en un sincero y emocionante abrazo al llegar a ella. “Esto es indescriptible. Todavía estamos empezando a ser conscientes de lo que hemos conseguido”, comentan. Se abrazaron también a sus compañeros, que les esperaban ya en la meta. La dureza no ha podido con ellos. Una mezcla de superación, fuerza mental y física, solidaridad y compañerismo la que les ha hecho llegar. 

Y ya pueden decir: “reto cumplido”.

Este es el reto Jesús González y Jorge García, pero tú también puedes ayudar y poner tu “granito de arena” para dar una vida mejor a los niños mozambiqueños. ¡Anímate y participa en #RetoGaiato! 

• Si eres deportista, puedes presentar como Jorge y Jesús un reto y pedir donaciones por una buena causa. Da igual tu sexo, raza o nivel físico… Ponte en contacto con nuestro equipo y empezaremos a asesorarte en el proceso.
• Y si no te gusta sudar la camiseta, no tienes excusa. ¡Puedes entrar en nuestra web, conocer los retos que ya están presentes y dejar una pequeña donación! Tu ayuda, por muy pequeña que sea, ayudará a la comunidad del país africana, asolado hace ya unos meses por el ciclón Idai.